Working Outfits - La imagen que Proyectamos

La imagen que uno proyecta es muy importante, sobre todo cuando se trata del mundo de los negocios. Es importante considerar unas reglas básicas que forman el “protocolo de vestuario” tanto para entrevistas de trabajo como para el trabajo mismo.

Es necesario ser discreto con la ropa en especial con los escotes y el largo de la falda. Los escotes demasiado pronunciados pueden emitir ideas equivocadas y muchas veces restarle valor a nuestro trabajo. Por otro lado el largo de la falda no debe ser demasiado exagerado si no proporcional a nuestro cuerpo y estatura. Una falda demasiado corta además de ser inapropiada puede ser muy incomoda para usarla en nuestro sitio de trabajo.

La elección de los zapatos puede variar dependiendo del lugar donde vamos a trabajar. En una entrevista de trabajo lo mejor es ir seguras de que estos son apropiados y para esta ocasión lo mejor son zapatos de tacón, cerrados y discretos. Estos deben hacernos sentir cómodas y en control de la situación. Si, por alguna razón especial se necesitan zapatos bajitos estos deben ser serios y elegantes para no ir en contra del resto de la ropa.

La cartera debe ser de un tamaño promedio. Suficientemente grande para incluir los documentos que nos han solicitado, lapicero (bien presentado y elegante) y lápiz, un lugar donde tomar apuntes y maquillaje para cualquier retoque. La cartera debe ser formal y tener un color que vaya de acuerdo con el resto del outfit.

Todo debe reflejar a una persona prolija, seria y preparada sin llegar a distraer la atención de nuestros talentos y capacidades.

Es necesario conocer si hay algún tipo de protocolo escrito dentro de la empresa donde trabajamos, porque puede haber reglas que se aplican solo para esta compañía.